Autoridad: ¡ Sí !
Criterio:Dudoso
Compromiso: No
Tres son las palabras que a mi juicio, representan los valores fundamentales del presidente de una plaza de toros: autoridad, criterio y compromiso. Todas ellas, perfectamente compenetradas entre si dan prestigio y categoría a la presidencia.
Por ello, independientemente del coso en el cual se presida; la autoridad permanece, el criterio lo da el conocimiento taurino y el compromiso cambia en función del nivel de la plaza. El problema llega cuando se mantiene la autoridad, pero el criterio es dudoso y el compromiso inexistente. Todo ello se erige en contra del espectáculo en particular y de la defensa de La Fiesta en general.
El hecho de saber donde se preside ha sido y es fundamental. Las exigencias de los diversos cosos y el público son completamente distintas. Por lo tanto, obviamente no es lo mismo presidir una corrida en Madrid que en Logroño, o en Nimes que Orthez o Vic-Fezensac, e incluso, por qué no, Orduña.
Un buen presidente es el que tiene compromiso con la plaza en la que desempeña su cargo. Su autoridad es la misma y el criterio también, pero el compromiso es esencial. Por eso, podemos decir que no hay buenos, ni malos presidentes, sino presidentes comprometidos o no. Y es que el presidente poco o nada comprometido, no es buen presidente y sí un mal aficionado cuando se erige como protagonista de la tarde. Pues para protagonistas el ocho de mayo en Orduña: el torero Iván Fandiño, la cantaora y el colorao de Gavira.
Un taurino